Nadie más que tú...

Las últimas semanas he tenido un poco abandonado mi blog, lo hecho de menos cuando no puedo escribir, y lo cierto es que no siempre es por falta de tiempo. Ha habido un par de post que me han dejado realmente vacía cuando los he escrito, y he necesitado tiempo para recuperarme y volver ha ser capaz de enfrentarme al teclado. Ya sabéis que esto para mí es una especie de terapia, y cuando toco determinados temas escabrosos es demasiado doloroso. Una persona muy especial en mi vida dice que debo tener cuidado con lo que escribo aquí, porque puede haber determinadas personas que en un momento puedan utilizar lo que escribo para conocer mis puntos débiles y hacerme daño de una u otra manera. No sé si tendrá razón, pero el saber que a algunas personas les interesa, aunque sea poco lo que yo pueda decir, me da fuerzas para seguir. No me gusta sentirme sola, y aquí sólo entran amigos, o por lo menos eso pienso que son, si alguien decide aprovecharse de esto para conseguir algo de mí, primero realmente no me conoce, y segundo a la larga saldrá perdiendo, porque gracias a Dios vuelvo a sentir que valgo la pena, tanto para mí como para los demás, y aunque sea poco, pero lo que yo pueda daros para que os sintáis bien lo daré de corazón sin esperar nada a cambio. Espero volver a coger ritmo, y seguir escribiendo, junto con lo de la Danza del Vientre son mis actuales aficiones, pero o me dedico a ensayar o terminarán echándome por patosa, jajajajajajajajaja. Ciao Bambinos.

“No hizo falta nada más fue tan suficiente verlo en tu mirada, clara como cristal. Me enseñaste a ver la luz cuando dentro de mi alma se apagaban mis ganas de continuar. Como si me conocieras de otra vida vas antecediendo todos mis instintos sin medida. Nadie más que tú sabe adivinar a donde voy. Nadie pudo descubrir, lo que yo realmente soy. Nadie más que tú ha sembrado paz en mi interior hizo renacer mi fe para ver más allá del sol. Cuando amanece y tú no estás toda mi energía fluye diferente, sin ti nada es igual. Mis secretos se revelan en tus brazos y mis dias se reducen a tu espacio y voy cayendo poco a poco porque nadie más que tu sabe adivinar a donde voy nadie pudo descubrir lo que yo realmente soy nadie mas que tu ha sembrado paz en mi interior hizo renacer mi fe para ver más allá del sol…” Ricky Martin