Oración...

Me miro al espejo y poco a poco me voy viendo en su reflejo. Me gusta poder encontrarme en él y me hace pensar. Pienso en todo lo que he cambiado éstos últimos años, pero sobre todo, cada vez más, me da por pensar en qué tengo que modificar de mi misma. Esta transformación no está siendo sencilla, más bien está resultando muy dolorosa, imagino que un dolor similar al que tiene que sentir un reptil cuando cambia de piel...no sé...creo que tiene que doler ese proceso. Recorro mi historia a menudo, repaso los errores, las decisiones equivocadas que me han llevado a este momento, y son muchas. Arreglar el pasado es imposible, pero intento aprender de él para corregir el camino, aunque aún no consigo descubrir cómo. Sé que hay muchas personas dispuestas a ayudarme, y yo estoy deseando que así pueda ser, pero... no creo que exista oración que decida por mí... al final soy yo quien se encuentra en los cruces de camino y debe optar por qué senda continuar. Y este cansancio, esta fatiga que me cala los huesos, ésta desazón que me paraliza el alma... Me gustaría desprenderme de la sensación de fracaso, de que todo me sale mal por un designio cruel del destino, que no soy capaz de romper con este maleficio. Al final sé que soy yo, que sólo yo me metí en éste laberinto del que ahora no sé salir, por más que lo intento, no encuentro la salida, y que seré yo la única capaz de retomar el timón de mi vida, mientras tanto...sigo cometiendo errores... o tomando veredas que no me llevan a ningún lado... o simplemente son parte del camino de mi vida que debo recorrer para llegar al final, para terminar por encontrarme a mi misma, para poder ser capaz de hacer lo que me tienen reservado. Y cada día hay que decidir... y cada día corro el riesgo de volver a equivocarme... pero cada día estoy más cerca de mí...

"Pierdo el tiempo pensando en lo esencial que a veces dejo pasar. ¡cuántos instantes he ignorado ya capaces de haberme cambiado! Y no hay oración capaz de decidir por mí ¡oh, señor!, no queda otra opción y jamás me vuelvo a arrepentir. Siempre hay una disyuntiva ante la cual siempre hay que elegir, no queda otra alternativa rápidamente hay que decidir. Y no hay oración capaz de decidir por mí ¡oh, señor!, no queda otra opción y jamás me vuelvo a arrepentir. Y no hay oración capaz de decidir por mí ¡oh, señor!, no queda otra opción y jamás me vuelvo a arrepentir..."

Héroes del Silencio