Mi princesa...

No he dejado de luchar, aunque me retire y me aparte a un lado, sé que la magia existe y que el momento no es el más propicio. No sé que pasara porque no puedo adivinar lo que guarda un corazón que no es el mío, pero los años y los golpes me han enseñado a saber cuando existen sentimientos y los hay, y son muy grandes, y asustan… Sé que mis formas y las suyas son muy distintas, que la distancia no es buena consejera, que las presiones y los problemas tampoco ayudan. No me rindo porque aunque no podamos nunca estar juntos siempre seremos el uno para el otro, queramos o no hay algo más fuerte que nosotros mismos, algo que nos unió un día de mayo y que no podemos borrarlo. Como amigos, como algo más, qué importa, nuestros destinos se cruzaron y se enredaron para siempre…Sé, que uno u otro, nos buscaremos pronto y que esta historia no tendrá fin, que siempre estaremos cerca, ojala juntos, pero es algo muy difícil, por no decir imposible, lo tengo asumido. No me importa de qué forma, solo que no se aleje y que pueda compartir con él sus preocupaciones, sus alegrías, sus males, sus buenos y malos momentos y aprovecharme de sus abrazos y sus palabras de cariño, de sus sonrisas que de tanta luz me llenan, de su mirada bruja, de los secretos…Se que esta vez no he podido escapar, me deje atrapar el corazón, y he de pagar las consecuencias, no me importa….no me rindo, me gustaría tanto ser su princesa….

“Que milagro tiene que pasar para que me ames, que estrella del cielo a decaer para poderte convencer, que no sienta mi alma sola, quiero escaparme de este eterno anochecer. Dice mucha gente que los hombres nunca lloran, pero yo he tenido que volver a mi niñez una vez más. Me sigo preguntando, porque te sigo amando y dejaste sangrando mis heridas. No puedo colmarte ni de joyas ni dinero, pero puedo darte un corazón que es verdadero mis alas en el viento necesitan de tus besos, acompáñame en el viaje que volar solo no puedo… Y sabes que eres la princesa de mis sueños encantados cuantas guerras he librado por tenerte aquí a mi lado no me canso de buscarte, no me importaría arriesgarte si al final de esta aventura yo lograra conquistarte y he pintado a mi princesa en un cuadro imaginario, le cantaba en el oído susurrando muy despacio tanto tiempo he naufragado y yo sé que no fue en vano, no he dejado de intentarlo, porque creo en los milagros. Sigo caminando en el desierto del deseo, tantas madrugadas me he perdido en el recuerdo, viviendo el desespero, muriendo en la tristeza por no ver cambiar este destino. No puedo colmarte ni de joyas ni dinero, pero puedo darte un corazón que es verdadero mis alas en el viento necesitan de tus besos, acompáñame en el viaje que volar solo no puedo. Y sabes que eres la princesa de mis sueños encantados, cuantas guerras he librado por tenerte aquí a mi lado no me canso de buscarte, no me importaría arriesgarte si al final de esta aventura yo lograra conquistarte y he pintado a mi princesa en un cuadro imaginario le cantaba en el oído susurrando muy despacio tanto tiempo he naufragado y yo sé que no fue en vano…no he dejado de intentarlo, porque creo en los milagros…” David Bisbal